El Arsenal ha ganado 2-1 al Chelsea en la final de FA Cup en Wembley, un triunfo que se convierte en el decimocuarto de los ‘Gunners’ y que sirve para clasificar a la Europa League de la próxima campaña. Los de Frank Lampard se han adelantado en el 5′ con un gol de Christian Pulisic, pero Aubameyang, el jugador del partido, ha remontado con un tanto de penalti en el 29′ y con una vaselina después de una buena jugada individual en la segunda parte.
Tras el pitido final todas las miradas se han centrado en los dos hombres más importantes en este tramo final de la temporada ‘Gunner’: el gabonés y Arteta. El delantero africano ha llegado a 22 goles en la competición doméstica (se ha quedado a uno solo del Bota de Oro Jamie Vardy) y marcó un doblete en las semifinales contra el Manchester City. En aquel partido Mikel Arteta derrotó a Pep Guardiola, su maestro, lanzando un mensaje de que la temporada aún se podía arreglar.
El técnico donostiarra cogió a un Arsenal que languidecía en mitad de tabla con Unai Emery, mejoró su parcela defensiva y comenzó a ascender puestos en la clasificación de Premier. Pese a caer eliminados en dieciseisavos de Europa League y descartar su clasificación a Europa vía liga no perdieron la fe, y esa convicción se ha visto recompensada con esta copa inglesa. Así, los ‘Gunners’ se mantienen como el equipo con más FA Cups conquistadas. Un buen primer título para la carrera de Arteta como entrenador el haber ganado el trofeo más antiguo en la historia del fútbol, con el que se convierte (junto a Graham Taylor) en el segundo técnico del Arsenal en alzarlo como jugador y entrenador.